Si
un r�gimen comunista est� en estado de crisis, si el r�gimen es d�bil, si su
liderazgo est� dividido o comprometido, el patr�n l�gico para la desinformaci�n
es ocultar la crisis y sus dimensiones, atraer la atenci�n a otras �reas y
problemas, y presentar la situaci�n tanto dom�stica como al mundo exterior de
forma tan favorable como sea posible. Se trata del patr�n de desinformaci�n
"fachada y fortaleza", o villa Potemkin.
Ha sido aplicado en todos los pa�ses comunistas, incluyendo por ejemplo a China
y Rumania, as� como la Uni�n Sovi�tica.
El patr�n
general de desinformaci�n determina las formas que toma y las t�cnicas
utilizadas. En el patr�n de fachada y fortaleza, la informaci�n que da�a al
r�gimen es suprimida y la informaci�n favorable es exagerada. Las cuestiones
reales son reflejadas vagamente, si es que se hace, en la prensa. Las
estad�sticas no son declaradas o son infladas. La propaganda juega un papel
preponderante porque se convierte ella misma en la forma principal de
desinformaci�n. Los enga�os especiales se llevan a cabo para apoyar la
credibilidad de la propaganda. Las fallas y debilidades del r�gimen son
presentadas como sus �xitos y fortalezas. La pasividad pol�tica e ideol�gica y
la retirada son presentadas como victorias pol�ticas e ideol�gicas. La
preocupaci�n por el futuro es presentada como confianza. Los temores del mundo
exterior a la fortaleza comunista son elevados deliberadamente y la amenaza
comunista es exagerada fuera de proporci�n de su verdadero potencial para
desalentar intervenciones externas en asuntos comunistas.
El uso
masivo de desinformaci�n de acuerdo con este patr�n fue aplicado durante las
purgas de Stalin y durante los �ltimos a�os de su vida. Por ejemplo, durante las
represiones masivas de la d�cada de 1930 el r�gimen se proyectaba al mundo
exterior, no sin �xito, como un modelo de sistema democr�tico bajo un l�der
fuerte. El Ej�rcito Rojo, cuyo cuerpo de oficiales fue eliminado, fue presentado
como el ej�rcito m�s poderoso del mundo. En el per�odo posguerra el declinio de
la influencia de la ideolog�a comunista y el grado de descontento popular en la
Uni�n Sovi�tica y sus sat�lites de Europa del Este fueron ocultados; la
importancia de la oposici�n a Stalin de Zhdanov y su grupo de Leningrado en 1948
fue ocultada exitosamente, igual que las tensiones entre los Sovi�ticos y los
Chinos y otros pa�ses comunistas. El bloque fue falsificado como un monolito. La
fortaleza pol�tica, militar y econ�mica del supuesto monolito fue gravemente
exagerada en la propaganda comunista, su principal veh�culo de desinformaci�n.
Para
evitar que Occidente detectara la profundidad de la crisis interna en el bloque
que la propaganda estaba intentando ocultar, el contacto entre los mundos
comunista y no comunista se redujo al m�nimo absoluto. Los ciudadanos sovi�ticos
y sat�lites tuvieron prohibici�n de viajar al extranjero excepto como miembros
de delegaciones oficiales; los delegados eran exhaustivamente controlados antes
de su partida y mantenidos bajo vigilancia cercana mientras estaban en el
exterior. Los �nicos visitantes del bloque de pa�ses no comunistas eran
comunistas y compa�eros de viaje, e incluso ellos eran cuidadosamente
seleccionados antes de que sus visitas fuesen autorizadas. Cuando llegaban sus
itinerarios eran firmemente supervisados, con una gran parte de sus programas
dedicados a visitar granjas colectivas y f�bricas que se organizaban como
lugares de inter�s tur�stico. Los diplom�ticos extranjeros y periodistas eran
sometidos a r�gidas restricciones; su viaje era limitado a una zona de
veinticinco kil�metros alrededor de la capital. Se establecieron procedimientos
estrictos para contactos oficiales entre diplom�ticos extranjeros y funcionarios
comunistas; se promulgaron decretos especiales en 1946-47 definiendo la
responsabilidad de los funcionarios sovi�ticos al tratar secretos de estado. El
contacto occidental con el hombre de la calle pr�cticamente no exist�a; y cuando
lo hac�a, era controlado. Con estas medidas los pa�ses comunistas estaban
literalmente sellados del resto del mundo.
Los
peri�dicos comunistas estaban desprovistos de ninguna noticia genuina. Sus
art�culos estaban interesados s�lo en la fortaleza del r�gimen, los logros de
sus l�deres y las deficiencias de los pa�ses del mundo no comunista. S�lo
aquellos expertos en el an�lisis de propaganda y desinformaci�n podr�an
ocasionalmente leer entre l�neas y deducir un indicio de lo que en realidad
estaba ocurriendo.
Discursos oficiales y documentos del Partido
Un
ejemplo del patr�n de fachada y fortaleza practicado en el tiempo se puede
encontrar en el informe del Comit� Central del PCUS en el Decimonoveno Congreso
del Partido en octubre de 1952. Trataba de la situaci�n pol�tica y econ�mica en
la Uni�n Sovi�tica y el bloque comunista despu�s de la guerra. Estos son algunos
extractos:
"El
problema del grano (en la Uni�n Sovi�tica) ha sido resuelto, definitiva y
finalmente resuelto.
Los
logros en todas las ramas de la econom�a nacional han llevado a una mayor
mejor�a en los est�ndares materiales y culturales de la sociedad sovi�tica.
Sin
desviarse en la implementaci�n de la pol�tica nacional de Lenin y Stalin,
nuestro Partido ha fortalecido el estado multi-nacional sovi�tico, promovi� la
amistad y cooperaci�n entre los pueblos de la Uni�n Sovi�tica, hizo que todo
apoye, asegure y fomente la eflorescencia de las culturas nacionales de la gente
de nuestro pa�s y libr� una lucha sin cuartel contra todos los diversos
elementos nacionalistas. El sistema pol�tico sovi�tico, que ha pasado a trav�s
de la severa prueba de la guerra y se ha convertido para todo el mundo en un
ejemplo y modelo de verdadera igualdad de derechos y cooperaci�n de nacionales,
es testimonio del gran triunfo de las ideas de Lenin y Stalin en la cuesti�n de
nacionalidades.
Las
relaciones de la URSS con esos pa�ses (los sat�lites comunistas) son un ejemplo
de relaciones totalmente nuevas entre estados, no conseguidas antes en la
historia. Se basan en los principios de derechos igualitarios, cooperaci�n
econ�mica y respeto por la independencia nacional. Leal a sus tratados de mutua
asistencia, la URSS est� representando, y continuar� haci�ndolo, asistencia y
apoyo en la consiguiente consolidaci�n y desarrollo de esos pa�ses".
Este
reporte era una parodia de la verdadera situaci�n del estado. Lo que dec�a era
la oposici�n directa de la verdad. Quienes lo crearon, quienes lo aprobaron y
quienes lo pronunciaron sab�an muy bien que era totalmente falso.
Operaciones especiales de desinformaci�n
Un Servicio
Especial de Desinformaci�n (Servicio 5) fue creado en 1947 como parte del
servicio de inteligencia sovi�tico, conocido como el Comit� de Informaci�n (KI).
Fue encabezado por el Coronel Grauehr.
Las
operaciones especiales de desinformaci�n para la inteligencia comunista jam�s
son consideradas como fines en s� mismas. Pretenden servir a fines pol�ticos,
usualmente creando y dando forma a las condiciones para su implementaci�n
exitosa. Como en los �ltimos a�os de la vida de Stalin hab�a una aguda crisis en
los asuntos sovi�ticos y carencia de ninguna pol�tica coherente para resolverla,
las operaciones especiales del Servicio 5 se limitaban al �mbito de operaciones
de propaganda no imputable dise�adas para ocultar la crisis y justificar algunas
de las instancias m�s indignantes e irracionales del comportamiento de Stalin.
Un ejemplo fue el esfuerzo por crear sospechas de que Tito y otros l�deres
yugoslavos eran agentes de larga data de Occidente.
Otro
factor limitante del alcance de las operaciones de desinformaci�n fue el culto
de la personalidad, que impregn� la dictadura de Stalin y prohibi� la franqueza
incluso cuando se requer�a para dar credibilidad a la falsedad. Dos ejemplos
ilustran esto. Un agente sovi�tico fue enviado en una misi�n a Occidente. �l
ten�a que pretender que era un desertor que buscaba asilo pol�tico. El pa�s de
acogida le permiti� dar una conferencia de prensa en la cual, como es natural,
�l critic� al r�gimen sovi�tico. Cuando Stalin ley� el informe de la conferencia
de prensa, pregunt� qui�n controlaba al agente, y luego dijo: "�D�nde trabaj�
antes de ir a inteligencia?". "Era un granjero colectivo", respondi� el jefe del
servicio. "Entonces", dijo Stalin, "env�enlo de vuelta a su koljoz si no puede
entender cu�n da�inas son sus declaraciones. Apuntan a nuestra inestabilidad
pol�tica".
En otra
ocasi�n el servicio de seguridad polaco cre� la ficci�n de que una organizaci�n
clandestina en Polonia, que de hecho hab�a sido liquidada, todav�a estaba
activa. Quer�an usar a la hipot�tica organizaci�n como un canal de informaci�n
pol�tica y militar. Cuando Stalin fue consultado para que autorizara el paso de
esta desinformaci�n, �l se rehus�: "Esto da una mala impresi�n de la estabilidad
pol�tica de Polonia", explic�.
En 1951,
cuando la inteligencia sovi�tica fue transferida del KI (Comit� de Informaci�n)
al MGB (Ministerio de Seguridad del Estado), el Servicio 5 se convirti� en un
directorio en el nuevo KI bajo el Ministerio de Asuntos Exteriores, tratando
s�lo con desinformaci�n diplom�tica. Durante la campa�a antisemita de 1951-53,
el Servicio 5 estaba tan desmoralizado como el resto del servicio de
inteligencia. De hecho, su cabeza, Grauehr, se volvi� loco. Fue seguido por Ivan
Ivanovich Tugarinov, que m�s tarde se convertir�a en cabeza del KI.
De "Nuevas mentiras por viejas. La
estrategia comunista de enga�o y
desinformaci�n". Anatoliy Golitsyn.
1984.